25.4.11

Echaba de menos reírme con ella un rato...
Tú llámalo como quieras. Yo voy a llamarlo libertad, antojo, autodestrucción, placer. Voy a dejar en el suelo la mochila por un rato y saldré a respirar la brisa. Sin peso, sin carga. Voy a beberme un sorbo de libertad y después miraré la mochila desde lejos. La observaré un rato y me preguntaré si vale la pena cargarla. Creo que optaré por dejarla en el suelo (todas mis mochilas están aparcadas en una esquina después de todo).
Nothing can harm you as much as your own thoughts unguarded.

- Buddha

22.4.11

The Strokes - Razorblade


Anything to forget everything.
No, my feeling are more important than yours.

Tell me, tell me, tell me, tell me

No, don't.

20.4.11

"Time flies. Time waits for no man. Time heals all wounds. All any of us wants is more time. Time to stand up. Time to grow up. Time to let go. Time."

19.4.11

The thing is you don't really know who to trust or when to trust them. Sometimes words come out with no intention of them doing so. You speak. You talk twaddle. You say something that really has you pending on a string. But no one is listening. Then you realize. You realize that same thing: you don't really know who to trust or when to trust them. Perhaps they simply don't have the answer, but sometimes it's worth giving it a shot. I myself have a lack of answers. For what I know, I ask much more than I answer. For what I don't know, I know too much. But we lie. Constantly. We lie to ourselves. We create a world in which everything, anything, is as we'd rather it be.

So I'm guessing that afterall, whatever we do, we do for a reason. And whatever we say, we say for a reason. Because, truthfully, who doesn't know that everything has already been said?
En la voz que emiten mis palabras,
encuentro el sabor de tus caricias entre caladas.
Me diste la luna en tu terrado
y aún te busco entre mis manos.
Te llevaste los besos,
me dejaste llena de sueños.
Y te busco a escondidas
sabiendo que era mentira.
Find a penny, pick it up
and you'll have all day long, good luck.

16.4.11

"'Cause you never think the last time is the last time, you think there'll be more... You think you have forever but you don't."

14.4.11

Muchas noches pierdes, pero ganas. Esa unidad de medición del perecimiento de las cosas se te escapa y lo vuelves a agarrar fuerte con la nostalgia. Te arropa cuando tienes frío, pero acabas dándote cuenta de que no proporciona mucho calor.

El tiempo debe ser el peor de los enemigos y el mejor de los amigos. Se lo lleva todo, incluídas las penas. Se lleva las risas y las lágrimas. Las deshace en su valor unitario de medición. Lo hace desaparecer, pero tiene un gran enemigo: la memoria. Ella es quien recupera todo lo que él se llevó.

Hay noches largas que ahora son puro sueño pero que en otros tiempos fueron largas conversaciones que desembocaban en el amanecer. ¿Dónde fueron? Se nota la ausencia de hablar sin tener en cuenta las horas y el movimiento de las agujas del reloj.

Pero muchas noches pierdes, pero ganas.
Un día = diez años

13.4.11


Qué vivo el sol mientras va muriendo

Formentera

Isla rodeada de mar cristal,
por tus caminos me llegas a fascinar.
Te escribo para decirte
que entre el verde, el azul y la sal,
se esconde un sentimiento descomunal.

Me llevaste a un faro
que se abría hacia alta mar -
el horizonte liso, oscuro,
con reflejo dorado -
me privó de respirar.

Lo único que me permitiste sentir:
libertad.

Y pisando tu suelo,
rocas de un tiempo ancestral,
me di cuenta de que, de momento,
lo que toca es caminar.

Caminando, caminando,
me llevas a punta Prima
mientras el atardecer cae
y culmina en tus salinas.

Atardeciendo, cayendo el sol,
a medida que el día termina,
toca despedirme,
bella isla cristalina.

Días de verano Mediterráneo

Vuelve a mí, brisa de verano.
Vuelve luna, cuado te hayas llenado.

Dame sueños de amores,
envuélveme de ilusiones.

Acaricia mi piel, arena.
Que luzca morena.

Arde, arde, como el desierto.
Que el sentimiento se mantenga despierto.

Al tacto del agua fría,
recuerdo los días en que sonreía.

Días de verano Mediterráneo...
Sin duda alguna, los mejores días del año.

La espera no espera a nadie.
You pull the knife out, you gotta heal the wound.

12.4.11

Tiene algo en la mirada. Es clara, es transparente, es cristal. Sus ojos, a diferencia de los míos, no saben mentir y la admiro por ello. Tiene un halo de sinceridad que la envuelve. Dice: "vamos a pintarlo, ven" y me escucha mientras quedo atrapada entre la pintura y ella. Es quien mejor me entiende y quien menos me juzga. Sí, la admiro y puede que hasta la idealice, pero es que está por encima de todo. Sin decir nada, lo dice todo. Y tiene algo en la mirada... Tiene algo en cada gesto... Tiene algo en su caminar que me impulsa a seguir caminando.
Me hundo en lo profundo de las personas y me ahogo intentando entrar en ese barco naufragado. Las escotillas son demasiado estrechas y a pesar de haber bajado a pulmón, no consigo adentrarme. No se ensanchan las oberturas. Intento conocer. Y mientras tanto, oigo como dicen que soy superficial. Será que no vale la pena quedarse sin aire. Será que tampoco me importa ahogarme. Será que el oxígeno no lo es todo y que la impotencia se hace grande.

10.4.11

There's always someone. There's always someone out there loving you, smiling for you, smiling because of you, giving up something for you, dreaming of you, crying for you... There's always someone. And then there's you. There's your smile, your love (or lack of it), your decisions, your dreams, your tears... The reasons behind them all.

It's action-reaction. It's always action-reaction.

She smiles-you smile.
He talks-you're silent.
You dream-you suffer.

And then it goes back to the start again. But the thing is, either way, if it's at the start or the finish line, there's always someone. Even when you know not of their being, there's always someone amongst all people.

6.4.11

Es de esos días en que el agotamiento puede contigo. Todo empieza a dejar de tener sentido. Tú pierdes el sentido. Pero llegan las nueve y empiezas a andar. Sola. Como más te gusta. Pasas un grupo de chicas. Al parecer no se han enterado de que había examen. Sigues andando. Te pasa por al lado un extraño y piensas: ya me están adelantando otra vez, y le sigues el paso. Se para porque parece que pasará un coche, pero decidida, pasas por su lado y cruzas. Me sigue. En la rotonda le pierdes y no puedes evitar una risa cuando te giras y ves que se ha chocado contra el árbol. Se mira la zapatilla pero no parece haberse hecho daño. ¿Le digo algo? Se para una mujer delante tuyo con el coche y te pregunta dónde está la facultad de periodismo. Le indicas pero no parece enterarse demasiado. Él sigue a tu lado sin cruzar. Se va ella y antes de decirte que pases, ya ha pasado él. Le sigues porque casualmente va en tu misma dirección. Andáis juntos sin decir nada y vuelves a pensar: Va, ¿le pregunto si se ha hecho daño?. Sonríes y no te animas a ello. Seguís caminando. Misma dirección, pero te distancias un poco. Él acaba cruzando la calle. Cada uno en una acera sin decir nada pero sabiendo que andabais en sentido paralelo. Entonces cruzas, has llegado al coche. Él ha llegado a su puerta. Le miras una última vez con un gesto y te mira mientras abre.

Al rato te das cuenta de que ese extraño te ha arrancado una sonrisa. Te ha hecho sonreír en un día que querías que acabase. Y se ha quedado en tu cabeza como una mera sombra de algo bastante grande: el poder de las personas.

Sin saberlo, se ha llevado consigo el vacío. Lo más probable es que no le vuelvas a ver. Lo más probable es que la vida no nos haga andar en la misma dirección. Pero lo incuestionable es que te ha abierto los ojos, se ha hecho con tu sonrisa y te ha dejado un ligero sabor a vida en la boca.
Con los ojos irritados por las ganas de dormir, me hago un café. El antídoto. Me preparo el desayuno y aparece él. Se ofrece a hacerme un zumo. Yo, sonriendo, le dejo. Me bebo ese zumo, mojo las galletas en café y cuando me las acabo, la taza sigue llena. Nos quedamos hablando. ¿Qué hora es? Las 10 menos cuarto. Ya se me ha vuelto a escapar el tiempo. Pero cabe decir que no hay nada como que se me escape con él.

4.4.11

Pensé que ese día en el que yo estaba arriba, despidiéndome, ella estaría allí para abrazarme al bajar. Pensé que él sería el amor de mi vida. Pensé que después de todo, la conocería a fondo. Pensé que perseguir mis sueños sería todo lo que haría.

La vida dio la vuelta. Crecí. Me di cuenta de que ese abrazo se había escapado hacía ya mucho tiempo pero que vendría algo momentáneamente más grande. Me di cuenta de que él no merecía mi corazón si era capaz de jugar con mi ego. Me di cuenta de que era ambiciosa queriéndolo saber todo y que debía aprender de los detalles. Me di cuenta de que perseguir sueños es una pérdida de tiempo, es mejor cumplirlos a medida que los improvisas.

La vida dio la vuelta. Crecí. Dejé de ser ingenua pero disfruto disfrazándome de tal de vez en cuando. Dejé de responder a las sonrisas cuando mi mirada se rompía. Dejé de engañarme y opté por conocerme un poco mejor. Dejé de caminar con prisa para verlo pasar todo más lento.

La vida dio la vuelta. Crecí.
Y sigo creciendo.